La gobernadora de Puerto Rico, Jenniffer González Colón, presentó hoy una nueva campaña educativa contra la conducción ebria y firmó la Ley 136-2025, legislación que establece pena de cárcel obligatoria para conductores que, bajo los efectos del alcohol o sustancias controladas, causen la muerte o daño corporal grave. El encuentro se realizó como respuesta a múltiples tragedias provocadas por el consumo de alcohol al volante, destacándose entre estas la muerte del joven Justin Rafael Santos hermano del artista urbano Arcángel.
La campaña se centra en la pieza audiovisual “Un sueño detenido. Un mensaje para salvar vidas.” inspirada en la historia de Justin. La producción, desarrollada con autorización plena de su familia y utilizando recreación digital, muestra momentos significativos del joven de forma sensible y respetuosa, convirtiéndose en el eje emocional del esfuerzo de concienciación de esta nueva ley.
Como portavoz principal de la campaña, Arcángel participó en representación de las víctimas y de su propia familia, que aún enfrenta el dolor causado por la pérdida de Justin. Su presencia simbolizó el impacto real y humano detrás de cada estadística y reforzó el mensaje de que una decisión irresponsable puede destruir familias completas.
Arcángel relató cómo la muerte de su hermano, ocurrida en noviembre de 2021 cuando una conductora ebria invadió el carril contrario en el puente Teodoro Moscoso, marcó su vida para siempre. Desde su experiencia personal, el artista exhortó al país a asumir responsabilidad y a optar por alternativas seguras como el conductor designado o el uso de transportación pública.
Justin, quien se destacaba como asistente de tarima y coordinador de presentaciones, soñaba con desarrollarse como empresario del entretenimiento y gestionar la carrera artística de su hermano. Su vida, llena de metas y aspiraciones, fue detenida de forma abrupta, convirtiéndose en un recordatorio de la fragilidad de la vida frente a la irresponsabilidad de conducir bajo los efectos del alcohol.
En redes sociales, Arcángel celebró la aprobación de la Ley 136-2025, catalogándola como un logro histórico para Puerto Rico: “Logramos crear la ley que asegura cárcel para todo aquel que prive de la vida a una persona por conducir bajo los efectos del alcohol. Lo logramos en el nombre de Justin y de todas las familias que han perdido un ser querido por culpa de un conductor ebrio e irresponsable.” Agradeció a la gobernadora de Puerto Rico a la Comisión para la Seguridad en el Tránsito (CST) y a las agencias involucradas por hacerlo posible.
Con esta legislación y la campaña educativa, el Gobierno de Puerto Rico y la CST reafirmaron su compromiso de prevenir fatalidades y proteger vidas. La historia de Justin Santos, ahora transformada en un poderoso mensaje público, busca crear conciencia colectiva y evitar que más familias sufran tragedias similares causadas por la conducción ebria.




