La polémica en torno a la inclusión de atletas que no pasaron sus análisis de elegibilidad de género en categorías femeninas alcanzó un nuevo punto álgido en los Juegos Olímpicos, cuando la boxeadora Imane Khelif derrotó a su rival Angela Carini en tan solo 47 segundos, obligándola a retirarse entre lágrimas.
El combate, correspondiente a los octavos de final del peso wélter, fue detenido rápidamente debido a la evidente superioridad física de Khelif, quien representa a Argelia.
Carini, visiblemente afectada y con lágrimas en los ojos, decidió no continuar para evitar lesiones mayores.
«No podía seguir. Me dolía mucho la nariz y dije: ‘Paren’. Era mejor no seguir. Podía haber sido el combate de mi vida, pero en ese momento tenía que salvaguardar mi propia vida también. Siempre he luchado contra hombres, entreno con mi hermano, pero hoy he sentido demasiado dolor«, expresó la italiana sobre los golpes recibidos.
La inclusión de Khelif y la taiwanesa Lin Yu-ting, ambas descalificadas del Campeonato Mundial de Boxeo Femenino en Nueva Delhi en marzo de 2023 por portar el cromosoma XY, ha reavivado el debate sobre la equidad en el deporte femenino.
A pesar de las controversias previas, ambas atletas están compitiendo en los Juegos Olímpicos, generando una intensa discusión sobre la normativa.
