La señora Wendy Rubiera, madre del adolescente Nuelvin Jeremías Rubiera, de 14 años, ultimado de varias estocadas por otro estudiante, denunció este martes que su hijo le reveló antes de fallecer quién fue el compañero que lo atacó, y aseguró que el agresor había advertido en varias ocasiones que “iba a acabar con su vida”.
El hecho ocurrió a las afueras del Politécnico Simón Antonio Luciano, en el sector El Ingenio Arriba, donde ambos cursaban estudios.
De acuerdo con la madre, el homicida menor de 15 años habría premeditado el crimen dentro del centro educativo, donde, según denuncias de la familia, “opera una banda que mantiene en zozobra a los estudiantes”.
Advertencias previas y discusión en juego de baloncesto
Asimismo, narró que su hijo le contó que tras sostener una discusión durante un juego de baloncesto, el agresor le dijo de manera directa: “Tú no vas a vivir más”.
Asegura que esas amenazas habían sido repetidas y que ningún miembro del centro educativo intervino, pese a los conflictos previos.
El adolescente murió tras recibir varias estocadas, que, según la familia, fueron la materialización de las advertencias.
“Es muy doloroso, pero Dios tomará justicia, porque el que ha hecho algo tiene que cumplir condena”, expresó entre lágrimas la madre.
Silencio por temor entre estudiantes
Familiares afirmaron que varios compañeros han evitado ofrecer declaraciones por miedo a represalias, debido a que el agresor supuestamente forma parte de un grupo que habría agredido a otros estudiantes anteriormente.
Pidieron investigar a profundidad la situación interna del politécnico, incluyendo a la dirección del centro, porque alegan que “hay más involucrados en la muerte del menor”.
Exigen justicia; audiencia aplazada por falta de abogado
El proceso judicial por el caso fue aplazado la mañana de este martes en el Tribunal de Niños, Niñas y Adolescentes de Santiago, debido a que los familiares de la víctima no contaban con un representante legal. La audiencia de coerción fue reenviada para las 2:00 de la tarde de hoy
Tanto la madre como el padre del menor, José Ariel Taveras, exigieron justicia y que las autoridades profundicen la investigación para evitar que situaciones similares continúen afectando a los estudiantes del sector.
