Lo que parecía ser una jornada escolar normal en la escuela primaria Fidelina Feliz Matos, en la comunidad de La Guázara, Barahona, se convirtió en una escena de angustia cuando parte del techo de la Dirección se vino abajo.
Estudiantes y maestros vivieron momentos de tensión al escuchar el estruendo provocado por los bloques de concreto que cayeron al suelo. Aunque nadie resultó herido, la sorpresa y el miedo fueron inevitables.
Un video difundido en redes sociales muestra los escombros esparcidos en el piso, reflejo del deterioro que amenaza la seguridad del plantel. El hecho ha generado preocupación entre padres, docentes y vecinos, quienes piden una intervención urgente de las autoridades.
Mientras tanto, la comunidad educativa respira con alivio al saber que no hubo víctimas, pero con el temor latente de que una próxima vez la suerte no sea la misma.
