Siete de los diez acusados por el robo de municiones en la Policía Nacional recibieron este martes 18 de meses de prisión preventiva como medida de coerción.
La decisión es de la jueza Fátima Veloz, de la Oficina de Atención Permanente del Distrito Nacional, que dispuso que los implicados cumplan la medida de coerción en el centro de retención de policías de Operaciones Especiales, ubicado en Manoguayabo, Santo Domingo Oeste.
La imputada Miguelina Bello Segura, quien no pertenece a las filas de la Policía, cumplirá prisión domiciliaria.
Mientras que a el capitán y auditor Víctor Santos se le impuso el pago de una garantía económica de tres millones de pesos y al sargento mayor Miguel Ángel Gómez Espaillat, dos millones de pesos.
El caso, denominado operación Pandora por el Ministerio Público, fue declarado complejo.